Los neófitos puede que no sepan cómo se aborda una traducción. Aún queda mucho por investigar sobre los procesos cognitivos que operan en el cerebro del traductor, pero normalmente solemos proceder siguiendo una serie de fases. En esta presentación se ve, grosso modo, los pasos que damos durante el proceso:
- Comprensión: El traductor debe entender el texto y las instrucciones que le da el cliente para realizar el encargo. Es evidente, pero no resulta tan fácil como parece. Normalmente, suple sus carencias temáticas o lingüísticas gracias a la documentación.
- Redacción: El traductor traduce a primera vista el texto original. Para ello, no utiliza papel y pluma, sino que suele utilizar, al menos, un procesador de textos y otros programas de ayuda a la traducción (TAO).
- Revisión: El traductor comprueba que el texto meta cumple los requisitos de las instrucciones y revisa que no haya fallos de ningún tipo (erratas, sinsentidos, anacolutos, etc.).
Agradezco sinceramente a Isabel García Cutillas, de El traductor en la sombra, que me haya permitido usar la foto de su escritorio (diapositiva 6).
4 thoughts on “El proceso de traducción”
Un placer, Judith. Gracias a ti por querer usar la foto. ;-)
¡Qué rapidez, madre mía! Si acabo de publicarlo… Como te comenté, en clase, causó muy buena impresión. :-)
En un mundo ideal, la mejor traducción es la que elimina justamente el proceso de traducción. Es decir: Comprender completamente el texto original. Conversión de palabras a conceptos. Redacción del texto nuevo en el idioma deseado. Esa es la buena traducción. Y ese concepto es todavía más importante para la interpretación. Aunque en la realidad, traducimos siempre más palabra por palabra y no seguimos siempre ese proceso ideal.
Muy interesante tu comentario. Veo que se me olvidó contextualizar un poco esta presentación que utilicé en primero del Grado de Traducción e Interpretación. Para algunos de mis alumnos, muchas veces la traducción a conceptos no siempre es posible porque todavía están aprendiendo. Les falta bagaje lingüístico y cultural, como a todos cuando teníamos dieciocho. De ahí que comente la importancia de la documentación, que es lo que suple el bagaje que no se tiene, ya sea porque eres novato, o porque estás traduciendo un tema que no dominas del todo.
Evidentemente, con el tiempo y la práctica, estas fases se desdibujan e intentamos ir más allá de la traducción palabra por palabra.
¡Muchas gracias por comentar!