En el ecosistema universitario español, la tesis doctoral marca un antes y un después, la diferencia entre el todo y la nada, entre el cielo y el infierno. Eso es, al menos, lo que nos dicen a los doctorandos. La defensa de la tesis supone la culminación de la etapa universitaria como alumno y la obtención del título supremo al que se puede aspirar desde el punto de vista académico.
Sin tesis no hay paraíso. Dicen que después de la tesis hay becas posdoc y que puedes llegar a ser profesor titular o hasta catedrático. Pero para ello, hay que publicar, tener impacto, pasar por una serie de figuras, acreditaciones, concursos, pruebas… Eso dicen.
Aunque, no nos engañemos; la tesis no garantiza nada más que haber sido capaz de hacer un buen tocho que acabará criando polvo en la biblioteca universitaria de turno o, con suerte, lo colgarán en el repositorio documental de turno. Porque suele pasar que muchas tesis se quedan en el purgatorio de la ciencia, independientemente de su calidad. C’est la vie! Por lo menos, si cae en el repositorio, es posible que alcance cierta difusión y, a pesar de que seguirá siendo literatura gris, puede que algún otro investigador le dé buen uso.
Sin tesis no hay paraíso. Ese es el mantra del despacho de becarios de la Facultad de Traducción e Interpretación de Soria desde hace unos dos años. Más o menos cuando empezaba a encarrilar la tesis, fue cuando surgió la idea de este artículo —antes incluso de que empezara a tomarme en serio este blog—. Pero hasta ahora no había adquirido cuerpo.
No he podido evitar googlear el título y he encontrado que otras personas ya habían notado este paralelismo anteriormente: En el blog m. y en la revista Hora universitaria de la Universidad Central de Venezuela, aparecen sendos artículos homónimos. Son curiosos, pues el primero trata del sentimiento de una doctoranda desde un punto de vista personal y el segundo nos advierte del síndrome TMT (Todo Menos Tesis) en el contexto del proyecto de fin de grado venezolano.
Sin tesis no hay paraíso es un lema que bien podría llegar a ser un gran tópico literario si lo formuláramos en latín :), del tipo carpe diem o ubi sunt ( ¿algún voluntario?).
Sin tesis ¿hay paraíso? El desarrollo de la investigación doctoral es como una montaña rusa o, como decía en algún lugar del libro de Jenny Williams y Andrew Chesterman The Map, A beginner’s guide to doing research in Translation Studies (aquí dejo una reseña de The Map), la investigación es una carrera de fondo plagada de obstáculos. Y, aunque todas las etapas de una maratón son importantes, el sprint final merece un último esfuerzo. Necesito rematar la faena y punto. Sin distracciones.
Así, pues, la falta de tiempo me ha animado a probar nuevos formatos más breves y concentrados. La fórmula de Twitter me ha convencido por el momento, pero volveré pronto con novedades. Me espera un largo y cálido de verano de redacción y revisión. El paraíso tendrá que esperar.
9 thoughts on “Sin tesis no hay paraíso”
Ánimo Judith! Con historias truculentas como estas animas a los futuros candidatos a doctorando como yo mismo :P
¡Gracias por los ánimos!
Hacer es el doctorado es toda una experiencia, así que espero que nadie te quite la ilusión.
¿Historias truculentas? Pues todavía me quedan unas cuantas que contar, pero tendrán que esperar una temporada. Estoy maquinando algunos cambios en el blog :D
Qué artículo tan bien escrito. :)
Bueno, como dije en mi charla: “Calma. Sigue intentándolo… Y llegarás a la meta”. ¡Así que un último esfuerzo para llegar al paraíso! ;)
¿Has pensado en hacer una serie Flash? Ya tienes el título, que es super pegadizo. Ahora solo te falta un personaje carismático a lo Cálico Electrónico (Cálico Doctoril? XD)
Gracias, Pablo. Me voy a poner colorada :-*)
Olli, la verdad es que es una buena idea eso de hacer una serie Flash. ¿Qué pasaría si mezclamos Cálico Electrónico y Betty la Fea? :D
Voy a apuntarlo en el cuaderno de proyectos posdoc.
Si le añades a alguien con extreñimiento, problemas de ansiedad y falta de sueño, seguro que sale un doctorando sin FPU XD
Hola Judith:
Primero que nada, felicitaciones por este artículo, en verdad me encantó. Te comento que ya egresé de mi plan curricular (estoy estudiando Traducción Inglés – español) y actualmente estoy haciendo mi tesis. Se agradecen artículos como éste, me sirve de guía para lo que quiero lograr. Saludos desde Chile.
Hola, Blackthorne:
Me alegro de que te haya servido. La tesis es una experiencia tan dura como emocionante. Espero que te vaya muy bien.
Saludos.